Brian May, legendario guitarrista de Queen, fue trasladado a un hospital luego de sufrir un ataque al corazón y padecer de un horrible dolor de pecho durante 40 minutos. No obstante, en estos momentos ya se encuentra bien y estas fueron sus palabras en un video subido a Instagram:
“Tuve una resonancia magnética y sí, tuve un desgarro en mi… mi glúteo máximo”, dijo en un video el día de hoy, señalando que asumió que la lesión era la causa del dolor que estaba sintiendo.
Sin embargo, una semana más tarde, el rockero dijo que todavía estaba en “agonía”, lo que lo llevó a hacerse una resonancia magnética de su columna vertebral, que reveló un nervio ciático comprimido.
“El nervio estaba muy comprimido y por eso tuve la sensación de que alguien me estaba poniendo un destornillador en la espalda”.
“En medio de toda la saga de la dolorosa espalda tuve un pequeño ataque al corazón”, dijo, agregando que soportó alrededor de 40 minutos de dolor y opresión en el pecho.
En el video, May reveló que su médico lo llevó al hospital, donde descubrió que tenía tres arterias bloqueadas, y fue tratado por los médicos como un “caso de emergencia”.
“En realidad resulté tener tres arterias que estaban congestionadas y en peligro de bloquear el suministro de sangre a mi corazón”, dijo.
Aunque algunos recomendaron que tuviera un bypass cardíaco triple, el músico les dijo a los espectadores que optó por tener tres stents – cortos, tubos de malla de alambre que actúan como un andamio para ayudar a mantener una arteria abierta.
El músico dijo que se sorprendió cuando descubrió su condición, después de haber pensado que era un “chico sano”.
“No tenía ni idea, tenía grandes electrocardiogramas y lo que sea, ya sabes. Nada podía decirme que estaba a punto de estar en verdaderos problemas, porque podría haber muerto por eso, por los bloqueos que había allí”, dijo.
“Cuando vine, fue como si nada hubiera pasado – no podía sentir que han estado aquí, no podía sentir nada”, describió.
Fuente: The Sun.