Need For Speed Payback, el regreso de una franquicia

Need For Speed Payback, el regreso de una franquicia
En conclusión:
Need For Speed Payback es un gran intento por devolver a la franquicia la gloria que ha ido perdiendo con cada entrega. Su enfatización por el modo arcade y una trama fraternal que nos recuerdan lo importante que es la unión, combinada con las características de tunning que ya todos conocemos y un mundo abierto por recorrer, se ven únicamente opacados por defectos técnicos que sin duda pudieron haberse pulido antes de su lanzamiento, pero no por ello podemos dejar de recomendarlo.
75

Tras darle descanso a una de sus series más queridas el año pasado, Electronic Arts y Ghost Games estuvieron trabajando arduamente en la entrega que devolvería a la gloria a Need For Speed, título que a pesar de haber gozado con buena recepción, no lograba sobresalir del todo desde la obra a cargo de Criterion Games. Con unos cuantos cambios narrativos y jugables, además de la reutilización de viejas técnicas conocidas, este nuevo juego ya se encuentra disponible en consolas y PC. ¿Qué nos pareció? ¡Entérate en nuestra review!

Need For Speed Payback, por si no tenías ni idea, es la nueva entrada a la franquicia, ubicado en una ciudad ficticia llamada Fortune Valley que, efectivamente, se basa en Las Vegas. En este paradisíaco lugar conoceremos a tres personajes principales llamados Tyler, Mac y Jess quienes ofrecen una trama rica en fraternidad, mientras los vemos fortalecer sus lazos para así derrocar a una amenaza conocida como The House. Esta historia, más allá de verse potenciada con un mucho mejor trabajo de desarrollo y guión, convence al jugador de estar ante una familia unida por el mismo objetivo, y además de relacionarse con sus personalidades y conductas, también querrás ser partícipe de todas sus acciones en este mundo.

Por otro lado, el sistema al estilo sandbox en esta ocasión resulta un tanto más ágil al ofrecernos distintos retos y carreras en los que cosntantemente podremos participar, para que la línea histriónica sea todavía mayor. Cuando decimos que su duración puede tornarse larga no lo decimos a la ligera, ya que terminarlo de principio a fin nos costó unas 20 horas aproximadamente y al hacerlo todavía tenemos la posibilidad de regresar a viejos lugares para completar tareas que dejamos pendientes. La sorprendente labor de Ghost Games es todavía más increíble después de apreciar los detalles que la compañía ha agregado a la saga, luego de venir trabajando en ella desde hace ya algunos años y su propio estilo en la misma está siendo notorio cada vez.

Los actores elegidos para representar a nuestros protagonistas, entre los que encontramos a Jack Derges, David Ajala, Jessica Madsen y Dominique Tipper, sorprenden al inyectar de personalidad propia a cada uno de estos, aunque flaquean en ciertos momentos que quizá debieron contar con un poco más de dramatismo. No obstante, los momentos vividos gracias a la vida que dieron a sus papeles asignados es de agradecer y reconocer. De cierta manera, Need For Speed Payback es el primero de su categoría en dar tanta importancia a la trama y que la selección del reparto haya sido tan atinada debe elogiarse. Claro que sabemos que no es el título que descubre el hilo negro, pero sí consideramos que de toda la saga es el que logra mejores resultados finales.

La jugabilidad para esta ocasión se ha visto favorecida por un par de técnicas que ya había utilizado Electronic Arts con juegos de la talla de Burnout Paradise o Need For Speed Carbon, dando prioridad al estilo Arcade, y tomando a la ligera un poco más las físicas realistas o un tanto más cercanas a esto, que sí habíamos percibido en Need For Speed (2015). Las libertades creativas que se ha tomado el equipo de Ghost Games nos remontan a épocas del PS2, cuando el ya mencionado título que se llevaba a cabo en la montaña Carbon era el rey de la época de fin de año y todos queríamos que nuestro Santa Claus nos lo dejara bajo el árbol. Al ponerle las manos encima a Need For Speed Payback no hubo un momento en que no sintiera esa curiosa nostalgia, y eso sin duda es un punto a favor.

Del lado técnico, Need For Speed Payback tiene quizá el punto más flaco de todos, y es que a pesar de que en PS4 no son tan notorias las fallas, los tiempos de carga en ocasiones son excesivos y aburridos. Hubieron momentos en que tardamos hasta 5 minutos en acceder al juego y aunque pareciera exageración, no lo es. De igual manera, las texturas en el mapa y los coches de pronto se desfasan y se ven borrosas, aunque luego de un tiempo estas mejoran y todo vuelve a ser lindo. Lo que sí que debemos enfatizar es que los efectos de partículas y colisión están muy bien trabajados, así que pueden esperar situaciones visuales impresionantes.

En conclusión, Need For Speed Payback es un gran intento por devolver a la franquicia la gloria que ha ido perdiendo con cada entrega. Su enfatización por el modo arcade y una trama fraternal que nos recuerdan lo importante que es la unión, combinada con las características de tunning que ya todos conocemos y un mundo abierto por recorrer, se ven únicamente opacados por defectos técnicos que sin duda pudieron haberse pulido antes de su lanzamiento, pero no por ello podemos dejar de recomendarlo.