La semana pasada tuvimos la oportunidad de ver “Oso Intoxicado” (Cocaine Bear para los que gustan del inglés) y hoy por fin podemos hablar de ella.
La película es sincera con el producto que está presentando y justamente esa es la magia de la misma, no es seria ni mucho menos oscura, mucho menos se toma en serio a si misma. Gracias a esas acciones es que se pudo presentar un proyecto nuevo, violento, gore y divertido. Muy similar a lo que fueran los films serie B de los 80s.
Y no solo eso, también es la última película filmada por Ray Liotta, cosa que la hace aún mas atractiva si eres fan del actor. Su personaje es una suerte de narco, que básicamente es el responsable de que tanto “producto colombiano” caiga en el bosque.
Y si bien si está basada en hechos reales (donde el oso básicamente murió minutos después de ingerir la cantidad industrial de producto que tuvo a la mano) acá vemos una criatura viciosa, que le gustó el jalón de energía que tomó y hará lo que sea por conseguir mas de “aquello”.
La película, al igual que muchas series B, tiene varias historias que se cruzan en el camino del Oso vicioso ya que por diferentes azares del destino se encontraban en el bosque, una buscando a su hija y su amigo, la guardabosques y el experto en fauna silvestre, un policía que escuchó un pitazo sobre la cocaína en el bosque, el hijo del narco y su mejor amigo buscando el producto y por su puesto Ray Liotta siendo Ray Liotta. Son 1 hora 35 minutos donde podrás reír y divertirte como nunca, es de las películas mas divertidas de lo que va del 2023 y justamente por lo que decíamos al principio no es pretenciosa ni se toma en serio.
Si bien tiene detalles, como todo en la vida, es algo que vale la pena ver en cines si lo que quieres es pasarla bien y no te escandaliza la temática de “drogas duras” que se maneja tan a la ligera.
