Tuvieron que pasar 10 años para que pudiéramos ver el regreso del Caballero de la Noche a las pantallas de forma individual. Tras la enorme polémica desatada por la elección de Robert Pattinson como el nuevo vigilante de Gotham, las expectativas estaban altísimas, así como los deseos de cierto sector de ver esta cinta fracasar.
Pero lo vamos a decir rápido y resumido: ‘The Batman’ es sublime. Siguiendo todos los básicos más elementales del cine noir, el director Matt Reeves nos entrega una cinta que ningún fanático del Murciélago en los cómics se puede perder.
Reeves decidió dejar de lado cualquier elemento fantástico que convierte a Batman en un superhéroe y retoma las raíces de su lado más realista -aún más que las cintas de Christopher Nolan- , dándonos a un Bruce Wayne joven (la cinta está situada en el segundo año de actividades como vigilante), que duda de su cruzada contra el crimen pero está totalmente obsesionado con ella; sabe que no puede solo, que tal vez su misión termine siendo un fracaso pero continúa levantándose noche tras noche buscando una respuesta y una posible redención.
De hecho, Robert Pattinson nos entrega a la versión más psicopática del personaje, al cual le importa poco o nada separar sus dos personalidades. ¿Donde termina Bruce Wayne y dónde comienza Batman? A diferencia de las anteriores películas, aquí no hay una clara diferencia si es que siquiera existe. A la versión de Pattinson no le interesa otra cosa más que su obsesiva búsqueda de venganza.
La fotografía de la cinta es hermosa. Es oscura -incluso demasiada oscura por momentos, por si se quejaban de los planos de Zack Snyder-, es densa, lo cual encaja perfectamente con el ambiente general de ‘The Batman’, que en sus poco menos de 3 horas de duración te tendrá al borde del asiento en tensión constante, mostrando a una Gotham más decadente que nunca; sucia, totalmente controlada por la corrupción y que sus sombras representan una amenaza constante para todos, incluyendo los criminales que temen meterse demasiado y encontrarse a un todavía poco conocido vigilante, todo esto aderezado por la estremecedora música de Michael Giacchino.
La elección de Paul Dano como The Riddler, no pudo ser más perfecta y superó con creces a la primera aparición del villano en la pantalla grande, que bueno, tampoco era una tarea muy complicada dejar atrás a Jim Carrey en pantalón verde. Dano se muestra peligroso y totalmente desquiciado, con claras referencias a varios asesinos seriales reales, sobre todo el Zodiaco, por supuesto.
La figura de The Riddler no tiene demasiado tiempo en pantalla, pero la amenaza de su presencia se siente, aún cuando no se vea. Es extremadamente inteligente, meticuloso y efectivo.
Uno de los grandes elementos a destacar, es la actuación de Jeffrey Wright como James Gordon, peleando codo a codo con un vigilante al que poco conoce, casi nada entiende, pero en el que confía totalmente. Por fin, podemos ver al futuro Comisionado de Gotham en acción, luchando y no como un mero elemento decorativo y narrativo dentro de una película de Batman.
La también controversial elección de Zoë Kravitz como Selina Kyle / Catwoman, también merece ser dejada atrás. La nueva versión de la mujer gato también deja de lado por un momento el aire de Super Femme Fatale que el personaje adquirió y se vuelve una lista e importante ayuda para el encapotado, altamente inspirada por el cómic The Long Halloween.
Igualmente, podríamos seguir hablando de los grandes aciertos que la producción tuvo al elegir al elenco, con menciones especiales para Colin Farrell y su gran actuación como Oswald Cobbelpot / The Penguin o John Turturro como un Carmine Falcone menos impontente, menos más apegado a su papel del líder de la mafia.
‘The Batman’ es tal vez la mejor película en solitario que se ha hecho de Batman, compitiendo por el lugar con ‘The Dark Knight’ y eso ya dependerá del gusto de cada quien. Es una cinta dura y que tal vez no guste a quienes están acostumbrados a pensar que el cine de cómics debe estar plagado de CGI, explosiones y acción. Es una película de detectives, con toques de cine de horror, espesa. ‘The Batman’ es otra cosa. Está en una liga distinta. Una que nos gusta mucho y no podemos esperar a ver su secuela.
