Anna Wintour deja su cargo como editora en jefe de Vogue EE. UU. tras 37 años de influencia

Anna Wintour, la emblemática figura que ha liderado American Vogue desde 1988, abandona su rol como editora en jefe tras casi cuatro décadas transformando el magazine. A sus 75 años, cede la dirección diaria editorial a una nueva figura, mientras asume una posición más amplia dentro de Condé Nast.

La reorganización es parte de una estrategia global: se creará un puesto de “Head of Editorial Content” que se encargará de las operaciones diarias, reportando directamente a Wintour. Ella, a su vez, mantiene sus títulos de Chief Content Officer de Condé Nast y Global Editorial Director de Vogue, lo que le permitirá influir en la estrategia y la visión editorial de la marca a nivel mundial.

Durante su mandato, Wintour consolidó el poder cultural de Vogue, impulsando icónicas portadas, fusionando moda de alta costura con cultura pop y posicionando eventos como la Met Gala como apuestas globales. Su legado ha sido tan influyente que incluso inspiró el personaje de Miranda Priestly en El diablo viste de Prada, convirtiéndose en un ícono mediático.

Wintour ha declarado que su motivación ahora está en mentorear a nuevas generaciones de editores, impulsando perspectivas frescas dentro de la revista y reforzando la creatividad. Aunque deja la gestión diaria, sigue comprometida con proyectos clave como la Gala del Met y futuras iniciativas de “Vogue World”.

Este cambio marca el final de una era para Vogue, pero también el comienzo de una nueva etapa bajo su dirección estratégica global. El nombre del nuevo responsable editorial aún no se ha revelado, pero la búsqueda ya está en marcha.