La nueva entrega de la franquicia Jurassic World, titulada Rebirth, ha conseguido un arranque espectacular en taquilla, recaudando 318 millones de dólares en su primer fin de semana a nivel mundial. Esta cifra la posiciona como uno de los mayores estrenos del año y el segundo mejor debut en la historia de la saga jurásica.
En Estados Unidos y Canadá, la película alcanzó 91.5 millones de dólares durante su primer fin de semana tradicional (viernes a domingo), y sumó un total de 147.3 millones en cinco días gracias al impulso del feriado del 4 de julio. A nivel internacional, aportó 171 millones de dólares, consolidando su alcance global.
La producción, dirigida por Gareth Edwards y con un elenco encabezado por Scarlett Johansson, Jonathan Bailey y Mahershala Ali, propone una nueva etapa dentro del universo jurásico. El guion, escrito por David Koepp, busca recuperar el espíritu de la saga original, combinando el asombro científico con el peligro latente de los experimentos genéticos descontrolados.
La recepción del público ha sido en gran medida positiva, destacando el equilibrio entre nostalgia y reinvención. La presencia de criaturas inéditas, una narrativa más madura y efectos especiales de alto nivel han sido elementos clave en el éxito de esta nueva entrega.
Con un presupuesto estimado en 180 millones de dólares, Jurassic World: Rebirth ha logrado recuperar una gran parte de su inversión inicial en cuestión de días. Además, posiciona a Universal Pictures como uno de los estudios líderes en este 2025, gracias a su capacidad para revitalizar franquicias emblemáticas.
El sólido desempeño de Rebirth abre la puerta a una posible nueva trilogía, y consolida la franquicia jurásica como una de las más rentables y perdurables del cine moderno. La expectación ahora gira en torno al anuncio de una posible secuela, que podría capitalizar el renovado interés del público por este mundo prehistórico.