Sean Combs, conocido mundialmente como P. Diddy, deberá continuar en custodia mientras enfrenta múltiples cargos relacionados con crimen organizado, tráfico de personas, posesión de drogas y armas. Un juez federal rechazó su petición de libertad bajo fianza, argumentando riesgos sustanciales de fuga y obstrucción de la justicia.
Durante la audiencia, la defensa de Combs solicitó que el empresario pudiera llevar el proceso en libertad, basándose en su historial como figura pública y su disposición a colaborar con las autoridades. Sin embargo, el juez determinó que las pruebas presentadas hasta el momento, así como el alcance de las acusaciones, justificaban su permanencia bajo vigilancia del sistema penitenciario federal.
El caso contra Combs ha generado gran atención mediática, no solo por la gravedad de los cargos, sino por su trayectoria como uno de los nombres más influyentes en la industria musical. Las investigaciones en su contra siguen activas y abarcan una serie de presuntas actividades delictivas que involucran a varias personas, entre ellas colaboradores cercanos y figuras del entorno del entretenimiento.
El juez también consideró el acceso de Combs a recursos económicos y su red internacional de contactos como factores que podrían facilitar una evasión judicial. Esta combinación de elementos fue clave en la decisión de negarle la libertad condicional durante el proceso.
Hasta el momento, la defensa no ha emitido una declaración oficial tras la resolución judicial. El equipo legal de Combs podrá apelar la decisión, pero por ahora el productor permanecerá bajo custodia mientras avanza el caso en su contra.







