Paramount presentó el primer tráiler de Primate, un thriller de terror dirigido por Johannes Roberts que desata un escenario de supervivencia extrema cuando una mascota exótica se convierte en una amenaza imparable. La película tiene estreno en cines programado para el 9 de enero de 2026 y ya generó revuelo por su propuesta visceral y práctica, cercana al terror de “animal descontrolado”.
La historia sigue a Lucy (Johnny Sequoyah), quien regresa de la universidad para reunirse con su familia durante unas vacaciones en el trópico. Lo que inicia como un respiro se transforma en pesadilla cuando Ben, el chimpancé adoptado de la familia, enloquece y desata una espiral de ataques que expone los límites del instinto humano por sobrevivir.
El elenco principal lo encabezan Johnny Sequoyah, Jessica Alexander y el ganador del Óscar Troy Kotsur. Se suman Victoria Wyant, Gia Hunter, Benjamin Cheng, Charlie Mann y Tienne Simon, además de Miguel Torres Umba como el chimpancé Ben. El tráiler enfatiza una puesta en escena cruda, con efectos prácticos y una atmósfera cerrada que incrementa la tensión minuto a minuto.
Primate está dirigida y coescrita por Johannes Roberts (con Ernest Riera), y producida por Walter Hamada a través de 18Hz, junto con John Hodges y Bradley Pilz. El metraje promocional perfila un film conciso y feroz, orientado al impacto sensorial: golpes secos de edición, proximidad de cámara, diseño sonoro agresivo y un crescendo que sugiere set-pieces de asedio en espacios domésticos.
La campaña de lanzamiento llega tras su premiere en un festival de género en septiembre de 2025, donde el título comenzó a construir boca-a-boca entre la prensa especializada. Con el tráiler ya circulando, el estudio posiciona Primate como un evento de terror de principios de año, apuntando a audiencias que buscan adrenalina pura y tensión sostenida.
Más allá del shock, la propuesta se asienta en un subtexto sobre tenencia de fauna salvaje, los límites éticos del “mascoterismo” y la falsa sensación de control humano sobre lo animal. Ese cruce temático, sumado al músculo técnico de la producción, la perfila como una de las apuestas más agresivas del horror mainstream en el arranque de 2026.
