Warner Bros. Games ha anunciado una reestructuración estratégica de su división de videojuegos, enfocándose exclusivamente en cuatro de sus franquicias más rentables: Harry Potter, Mortal Kombat, DC (con especial énfasis en Batman) y Game of Thrones. La reestructuración implica una reorganización interna donde cada línea tiene su estudio líder dedicado.
Este nuevo enfoque responde a un año complicado para la compañía, marcado por cancelaciones como el juego de Wonder Woman y el cierre de estudios como Monolith Productions, Player First Games y WB Games San Diego. También se da tras reportes financieros que mostraron pérdidas significativas por títulos como Suicide Squad: Kill the Justice League, mientras que Hogwarts Legacy fue uno de los pocos éxitos recientes.
Para supervisar esta consolidación, se han promovido internamente los responsables de los estudios clave: Yves Lachance (WB Games Montreal) estará a cargo de los proyectos de Harry Potter y Game of Thrones, mientras que Shaun Himmerick (NetherRealm Studios) liderará los desarrollos de Mortal Kombat y DC. La idea es dar mayor claridad, enfoque creativo y eficiencia a cada línea de videojuegos.
Además del desarrollo de estos grandes títulos, la compañía planea impulsar su presencia en plataformas móviles y recuperar la confianza del mercado con juegos de “alta calidad”. Se espera que esta estrategia genere lanzamientos relevantes en los próximos años, incluyendo secuelas como Hogwarts Legacy 2, nuevas entregas de Mortal Kombat, y títulos del universo DC en línea con la nueva visión del universo cinematográfico.